En Compras de + $999.00
En Compras de + $999.00
El equipo de protección personal (EPP) es una barrera vital entre los trabajadores y los riesgos del entorno. Pero elegir mal este equipo puede costarte más de lo que imaginas: multas, accidentes, o incluso pérdida de vidas. Aquí te explicamos los errores más frecuentes al comprar EPP y cómo tomar mejores decisiones.

Uno de los errores más graves es confiar en cualquier producto que se vea “seguro” sin comprobar si ha sido probado y aprobado bajo normas oficiales. Usar equipo sin certificación puede dejar a tus empleados desprotegidos ante riesgos reales.
👉 ¿Qué hacer?
Verifica que los productos cuenten con certificaciones como NOM, ANSI o NIOSH. Estas garantizan que el equipo ha pasado por pruebas estrictas y es apto para usarse en entornos laborales exigentes.
El EPP debe ser funcional, pero también cómodo. Un mal ajuste puede provocar distracciones o, peor aún, fallos de protección. Imagina un respirador que no sella bien o unos guantes que no permiten mover los dedos con libertad.
👉 ¿Qué hacer?
Elige equipo que venga en varias tallas o modelos ajustables. Es ideal hacer pruebas antes de comprar para asegurar que cada trabajador tenga un equipo que le quede bien y le permita moverse con naturalidad.

Es común caer en la tentación del precio más bajo, pero cuando se trata de seguridad, eso puede salir muy caro. Un chaleco que se desgasta en una semana o un casco que no resiste impactos es una mala inversión.
👉 ¿Qué hacer?
Apuesta por marcas reconocidas y proveedores confiables. Evalúa la relación costo-beneficio, considerando durabilidad, materiales, y respaldo de fábrica.
El mejor equipo pierde su valor si el usuario no sabe cómo usarlo correctamente. Muchos accidentes ocurren no por fallas del producto, sino por desconocimiento o mal uso.
👉 ¿Qué hacer?
Incluye sesiones breves de capacitación al entregar nuevo equipo. Enseña a usarlo, ajustarlo, limpiarlo y cuándo es momento de reemplazarlo.

Aunque el equipo sea de buena calidad, su efectividad disminuye con el tiempo si no se revisa ni se cuida. Un arnés dañado o unos lentes rayados pueden poner en peligro al trabajador.
👉 ¿Qué hacer?
Establece revisiones periódicas y rutinas básicas de mantenimiento. Cambia el equipo dañado o vencido sin dudarlo.

Comprar EPP no es solo una compra más; es una decisión de responsabilidad. Evitar estos errores te ayudará a cuidar a tu equipo, cumplir con la normatividad y optimizar tu inversión.
![]()
En Dibamex podemos asesorarte para que elijas el equipo más adecuado para tu giro y condiciones de trabajo. Escríbenos y con gusto te ayudamos a tomar la mejor decisión.
Dejar un comentario